Por J. J. Rosario
Antes de
sumergirnos en este tema debemos definir la palabra incertidumbre que no es más
qué falta de seguridad, de confianza o de certeza sobre algo.
Precisamente eso es lo que está pasado
en los partidos políticos de la República Dominicana tras el proceso de reforma
constitucional para dar paso a la reelección presidencial.
El intercambio o trueque que se realizó con
senadores y diputados del PLD, trajo consigo que en ese partido fue que se
iniciaron los disgustos internos, pues quienes aspiraban por primera vez a esas
posiciones les cerraron las puertas en sus narices.
Se agregó a ese malestar el cumplimiento
del pacto que hicieron Danilo-Miguel, pues también se produjo la misma
situación a lo interno del Partido Revolucionario Dominicano.
Desde ese acontecimiento la
incertidumbre interna se apoderó de los
cuatro partidos mayoritarios, es a saber PLD, PRD, PRM Y PRSC.
En el PLD trasegaron todas las decisiones
a su poderoso Comité Político y su comisión electoral que introdujo la novedad de las encuestas para seleccionar
sus candidatos en aquellos lugares que estaban flojos, especialmente sus
alcaldes, acción que inmediatamente adoptaron las demás organizaciones
políticas. Las llamadas convenciones las borraron del mapa eleccionario.
Esas decisiones del Partido Gobernante
fue como una enfermedad contagiosa que afectó a las demás organizaciones
políticas y a estas alturas del juego ninguno tienen sus boletas listas, pese a
que la Junta Central Electoral, conforme a sus reglamentos, dejará abierta la
campaña en apenas horas.
En la actualidad, citando como ejemplo al
Municipio Consuelo, la incertidumbre
se adueñó de todos los que soñaban con ser diputados, alcaldes y regidores,
pues las organizaciones políticas a las cuales pertenecen los dejaron hacer
campaña abierta para lograr esas posiciones y ahora resulta que arriba, en la cúpula
de esas entidades políticas, es que se decide quién va y quien no va, no importando
el que salga perjudicado.
El Partido Revolucionario Moderno
seleccionó mediante encuesta al Dr. Oscar Rijo Acevedo, acción que ocurrió en
el Partido Reformista Social Cristiano que las encuestas favorecieron al
empresario José Sánchez, y en el limbo está la escogencia del candidato del
Partido de la Liberación Dominicana, que sus aspirantes se desgastan en una guerra de rumores que
aumentan la falta de certeza y seguridad, lo que podría originar una división
mayúscula en el caso de que no se escoja un candidato miembro de esa
organización.
Se espera que en los días venideros todo
esto coja otro color, mientras tanto la incertidumbre seguirá su agitado curso
en nuestros partidos políticos.
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